Todo el suspenso contenido en un pulcro envase blanco… Foto por: Fernando Santmaría.
Muchas de las mejores creaciones humanas comenzaron como una atracción de feria: la hipnosis, el cine, el espiritismo. Comenzaron después de un “¡Pásele, pásele, fenómeno nunca antes visto!”. Comenzaron durando apenas unos minutos dentro de una carpa. Las primeras veces los asistentes salían despavoridos y después comenzaron a abarrotar las no sólo las carpas, sino los salones, y hasta los teatros. Cada uno se desarrolló a su manera. De la hipnosis nació el psicoanálisis, el cine se convirtió en un arma política y el espiritismo fue en una de las doctrinas más populares en el siglo XIX.
Pero, ¿qué pasa cuando un invento que ya se desarrolló a lo largo de siglos, se vuelve a mostrar como una atracción de feria? ¿Cómo una experiencia teatral? Ohmygosh.
El espiritismo satisfizo la necesidad espiritual del S. XIX
En un rincón minimalista frente a la entrada del Museo Tamayo se encuentra la posibilidad de vivir una sesión espiritista tal como probablemente comenzó, como una experiencia seguida de un “¡Pásele, pásele!”. Mas en esta ocasión se vale de una tecnología poco utilizada en el entretenimiento masivo: el sonido binaural. Si no lo han experimentado ¡pásenle, pásenle!
La compañía londinense Darkfield, llegó a la CDMX con Séance —“sesión” en francés— un espectáculo de teatro inmersivo con diseño sonoro binaural, realizado por Glen Neath y David Rosenberg.
Desde Psicofonías Podcast acudimos y les trajimos esta reseñita.
Glen Neath y David Rosenberg, artífices del proyecto
Les podemos decir que es un experimento muy distinto que mezcla teatro, tecnología sonora, terror y nostalgia por las sesiones espiritistas. Se vive colectivamente dentro de un contenedor, una escenografía sencilla y audífonos. Con juegos de voces, actores y un simulador crean una experiencia que, para aquellos poco acostumbrados al terror, es imposible de terminar y para los amantes del género, es una buena razón para salir de la oscuridad de su habitación llena de posters de cuervos y calamares monstruosos.
Psicoescucha, probablemente tú no te asustes tanto, pero lleva a tus amix o a tu familia para que empiecen a amar el género que a ti tanto te gusta y tal vez un día dejen de mirarte con sospecha.
Hombro a hombro, la experiencia se vuelve escalofriante cuando te pones los audífonos. Foto por: Fernando Santamaría.
Eso sí, prometen una “sesión de espiritismo como las que se realizaban en la época victoriana…” Mmm, no. No les vamos a mentir: no sigue el proceso, ni la duración, ni los usos y costumbres de una sesión de espiritismo de antaño. Si además de amar el terror saben del tema, esperan una sesión completa y les gusta ñoñear como a nosotros, no se ilusionen con aprender cosas nuevas o viajar en el tiempo. Mejor disfruten la tensión y gocen del sonido binaural.
Lo que sí lograron en este laboratorio sonoro, como ellos le llaman, fue hacernos dudar de nuestros sentidos y de nuestra capacidad de percepción en la oscuridad. ¿Es el sonido? ¿Son actores? ¿Es un simulador? ¿Un espíritu chocarrero se va a posesionar de mí? ¿Hice mal comiendo esos chicharrones antes de entrar?
La explanada del Museo Rufino Tamayo será sede todo agosto de esta experiencia. Foto de Fernando Santamaría.
Pase lo que pase, recuerden esta experiencia, porque tal vez el sonido binaural es en esta ocasión una atracción de feria, pero probablemente es el futuro del entretenimiento. Y si bien las sesiones espiritistas ya ocurrieron hace un par de siglos, nos hace creer que pronto, gracias a la tecnología ¡podremos acceder a cualquier época! Claro, si el cambio climático no nos extermina primero.
Las funciones son en el Museo Tamayo: Av. Paseo de la Reforma 51, Bosque de Chapultepec, Bosque de Chapultepec 1ra Sección, 11580, Ciudad de México, CDMX.
La duración por función es de aproximadamente 15 minutos.
Las funciones comenzaron el 1 de agosto, consulten los horarios.
El costo es de $150 por persona y pueden adquirir sus boletos en la página oficial.
Estacionamiento: en el museo, $65 tiempo libre
Recuerden contarnos su experiencia.
Los abraza Psicofonías Podcast.
Séance.
